domingo, 30 de marzo de 2008

a la lata, al latero, a la hija del chocolatero...

A la lata al latero, a la hija del chocolatero….

Y corríamos y saltábamos divirtiéndonos, después agarrábamos “las bolitas”, “las piedras” “para la payana” “pedazos de baldozas, para jugara a la catadita” “la pelota de trapo”, con la cual nos ingeniábamos para armarlas de distintos tamaños y durezas, y jugar distintos juegos, que combinaban las destrezas y habilidades para que conformen el placer del juego. Todo eso combinados con nuestras tareas escolares en las cuales debíamos estudiar primero, para poder salir a jugar, y tan solo durante el día, porque la noche era para descansar. ( Entiéndase a partir de las 0 hora)

Los “jóvenes viejos de mi edad” (55), se deberán acordar, hoy somos, la gran mayoría padres de estos jóvenes deseosos de “divertimentos nocturnos”, que parece que las horas del día no les alcanzan para ello, o quizás no sepan divertirse sino es trasgrediendo lo que es natural, el día para andar, la noche para descansar.

Quizás sea porque nosotros enfrentábamos desde el juego mismo “la posibilidad de tener la posibilidad”(Piaget), es decir saber que lo que no podíamos lograr en ese momento, lo podíamos en el próximo y siempre el otro nos estaba preparando para algo distinto, estaba latente la posibilidad de leerle la mente al contrario para adelantarse al resultado, mirar más allá de los hechos aunque no nos dábamos cuenta en ese momento, mientras que hoy juegan juegos que la tecnología de punta les indica, y que no les permite idear su propio juego, porque ya lo ideó otro, y que además tiene el mismo resultado que mañana, no permiten ver más adelante.

Quizás haya un pensamiento, que

Hoy es distinto, no podemos comparar, son tiempos distintos y eso es obvio, pero, no debemos comparar el tiempo, sino el hecho, ¿nosotros no nos divertíamos acaso? Teníamos todo el día para hacerlo, y era más que suficiente, en definitiva, habrá que diferenciar el día, de la noche y no hacerlo una continuidad, para poder establecer para que esta, cuales son los beneficios de uno y otro, a quien beneficia y a quien perjudica, que significa no asumir las responsabilidades, si me va mal en la escuela, ¿soy parte de es situación? ¿0 es el otro el responsable de esa situación? Qué significa jugar juegos de la “muerte”, que significa jugar juegos creativos, en nuestra época trasnochábamos solo para las fiestas de fin de año, y no nos ha pasado nada. Una anécdota, para mencionar, “en una oportunidad los changos del grupo, que éramos practicantes deportivos, decidimos pasar toda una noche en vela como una forma de sentirnos transgresores de esa realidad y “tomándonos unas cervezas”, y resulta que a eso de las dos de la mañana se nos acabó y no podíamos encontrar una lugar donde comprar más” y hoy estamos aquí en esta misma sociedad sin que nos haya perjudicado en nada el hecho de no encontrar un lugar para comprar cervezas” en la madrugada.

Hoy, se genera una polémica y un tratamiento particular por el horario del cierre de los boliches como si el hecho fuese de vida o muerte, realmente para quien (y en esto quiero hablar desde mi subjetividad) ha formado parte de distintos momentos, pretendo expresar que no encuentro explicación para esto, parecería ser que se producirá una hecatombe social si se cierran los boliches y bares y cualquier otro lugar que lo único que pretende es beneficiarse a si mismo. No estoy en desacuerdo con los beneficios que deben buscar cada uno, si estoy en desacuerdo que esos beneficios no se transformen en perjuicios para nuestros hijos.

Hoy somos todos exponentes de esta sociedad, en la cual estamos queriendo darnos cuenta que algo no este bien, y que debemos hacer mucho para que no se nos escape de la mano. Quizás esa sea la diferencia, ver que las cosas se encaminen por lo que parecería deba ser, lo difícil es determinar que es lo que esta bien y que es lo que esta mal, porque hoy en día parecería ser que se desecha lo viejo por lo nuevo, como si todo lo nuevo fuese mejor, y habrá que revisar, reflexionar como se esta pretendiendo ahora, pero a partir de tomar decisiones fuertes en un principio y que obliguen a un primer cambio, para que después pueda ser consensuado.

Prof. Juan Carlos Díaz

Lic. En Educ. Física

Jornadas de Liderazgo

Jornadas de Liderazgo
Lic. Juan Carlos Diaz

Convivencia

Convivencia
Colegio del Centenario